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Cuba Luz del Mundo

Logra cubano cuarto lugar en Mundial de Calculo Mental

El joven cubano Yusnier Viera Romero se ubicó en el cuarto lugar entre 37 participantes en la Segunda Copa Mundial de Cálculo Mental, efectuada en la ciudad de Giessen, en Alemania.

Viera logró su menor resultado en la categoría de cálculo de fecha con el segundo puesto, mientras que en la de sorpresa obtuvo la tercera posición, en multiplicación la quinta, en raíz cuadrada la novena y en suma la decimocuarta.

El cubano, único representante por América Latina, tiene 24 años de edad, es licenciado en ciencias matemáticas y se desempeña como profesor en la Universidad de La Habana.

Natural del municipio habanero de Bejucal, Viera Romero posee dos record Guinnes, uno de ellos en fechas del calendario al conseguir 20 resultados positivos en solo 19,8 segundos, y el otro por 42 aciertos en un minuto. (AIN)

Sueños de un campeón
Por Ricardo Alonso Venereo
[17.05.2006]-Actualizado 9:10 am de Cuba

El pasado 26 de abril el joven bejucaleño Yusnier Viera Romero cumplió 24 años de edad. Ese día festejó, junto a sus padres Javier y Amarilys, su novia Dayana y amigos no solo un nuevo escalón en su vida, sino también el saberse el primer cubano y para más habanero, que inscribe su nombre en el Libro de Records Guinnes en la modalidad de cálculo mental.

El joven bejucaleño Yusnier Viera Romero.Yusnier es graduado con Título de Oro, en 2005, de la Licenciatura en Ciencia de la Computación, que se estudia en la Facultad de Matemáticas y Computación, de la Universidad de La Habana. Sin embargo, durante la entrevista Yusnier junto a sus padres Daniel y Amarilys, su novia Dayanadescubrimos la esencia afable de nuestro interlocutor, caracterizado por su trato sencillo, discreto y pausado al hablar.

—¿Cuándo decidiste que serías matemático?

—Bueno, recuerda que soy científico de la Computación, también nos llaman cibernéticos; aunque no se puede negar que no hay un abierto desarrollo computacional sin la aplicación adecuada de las matemáticas

—¿Cómo te conviertes en profesor universitario?

—Desde el segundo año de la carrera ya era alumno-ayudante de una asignatura llamada Matemática Numérica, muy importante para nosotros los científicos de la Computación. Al graduarme me propusieron trabajar como profesor adiestrado en el tiempo de mi Servicio Social. Actualmente estoy matriculado en la Maestría en Ciencias Matemáticas y con Mención en Matemática Numérica. También imparto conferencias de esta asignatura al Curso Regular Diurno.

—¿Qué día estableciste tus records, dónde y en presencia de quién; o sea, quién avaló tu hazaña para que, finalmente, fuese reconocida?

—Establecí mis records el pasado 31 de octubre de 2005. Para validar este notable hecho se necesitaba de la composición de un jurado que cumpliera ciertos requerimientos. Mi caso debía tratarse con un jurado experto en cálculo mental o profesores de calibre de la Universidad, especialistas en Matemáticas. Era preciso el aval de dos testigos que también debían ser especialistas en cálculo mental o matemáticas. Por supuesto, se requería filmar aquel hecho para registrarlo como prueba. Esa vez no hubo ningún juez internacional, aunque aquí (en Cuba) contamos con especialistas calificados.

—¿Desde cuándo empezaste la preparación para romper los records?

—Antes de graduarme y durante mi etapa de tesis dedicaba algún tiempo a la memorización de las fechas, por ejemplo, y logré en estas prácticas superar la marca mundial establecida. No obstante, comprendí que debía esperar otro momento para prepararme con mucho más tiempo para este objetivo.

—Te refieres a los anteriores ganadores. ¿Pero quiénes eran, cómo sabías de sus éxitos?

—Debo aclarar que se trataba de sendas marcas mundiales. La primera consistía en determinar 20 fechas en el rango de 2001 a 2100, en el menor tiempo posible. Pertenecían al alemán Matthias Kesselchlager, a quien no he tenido el gusto de conocer. Su registro detuvo los cronómetros en los 24,94 segundos. Sin embargo, rebajé este tiempo hasta 19,8 segundos.

"La segunda marca a superar consistía en calcular la mayor cantidad de fechas en el período comprendido entre 1600 y 2100. Se disponía de un minuto. Pertenecía al mismo alemán, el cual había logrado calcular 33 fechas en 60 segundos. Logré calcular 42, o sea nueve más en el mismo tiempo, superando así la primacía anterior.

—¿Cuándo te diste cuenta que mediante el cálculo mental podías llegar a algo más importante?

—Desde pequeño me era muy fácil hacer cálculos mentales. Siempre me destaqué en este sentido, incluso era capaz de sacar conclusiones que a otros les podrían parecer precipitadas a pesar de que ya yo había analizado todas las alternativas.

—¿Acaso codiciabas estos premios?

—En realidad quería demostrar mis potencialidades. Es lógico. Un buen día supe de que se hacían competencias mundiales de Cálculo Mental y me dispuse a estudiar y entrenar algunas modalidades del cálculo. De esta forma encontré la categoría de fechas del calendario. Pensé durante algún tiempo cómo era posible que alguien pudiera calcular el día de la semana de una fecha de forma tan rápida y después de adentrarme en ese mundo encontré la forma.

—¿Obtenerlo te hace diferente a los demás?

—No.

—¿Tienes conocimiento si algún otro cubano lo intentó alguna vez?

—En el caso de mi categoría encontré nombres de franceses, canadienses, alemanes, pero ningún cubano.

—¿Te preparaste solo o te asesoró alguien, alguna institución?

—Esencialmente me preparé yo solo. Mención aparte al apoyo de mi familia, mi novia Dayana y mis amigos más allegados que me ayudaron en mis días de entrenamientos. Fueron muchas sesiones. Cronómetros en mano marcando mis tiempos. Un trabajo muy duro para todos. Realmente esto del cálculo mental, a pesar de lo espectacular que pudiera ser, no existe en nuestro país, al menos no tengo conocimiento de alguna persona que también realice esta práctica. No obstante lograr el récord, sigo sin tener información de que alguna institución se encargue de apoyar a nuestros posibles recordistas guinness en esta especialidad, ni siquiera en el cálculo mental.

"Pienso que esto se deba a que no somos muchos los cubanos que tenemos el honor de pertenecer al Libro de Records Guinness, aunque llamaría la atención para que se nos tenga en cuenta."

—Se sabe que el premio en metálico asciende a 10 000 dólares. ¿Lo recibirás?

No recibiré ningún premio en metálico por mis resultados. Según tengo entendido, quienes pagan dinero son patrocinadores del Guinness, pero verdaderamente no sé mucho acerca del tema.

—¿No te importa no recibir ese dinero?

—Te soy muy sincero. El dinero es, inevitablemente, una fuente de inspiración material. Pero, increíblemente, desde el momento que intenté romper el récord no me pasó por la cabeza otra cosa que no fuera lograrlo, sin importar las conveniencias monetarias que pudiera traerme.

—¿Por qué, entonces, le "tiraste" al premio? ¿Lo intentarías de nuevo?

—Pienso intentarlo próximamente, aunque debido al alto contenido de trabajo en estos tiempos me veo un tanto estacionado en el tema del récord. Probablemente utilice las vacaciones. Aunque en mi tiempo libre lo intento de nuevo.

—Bien, cuando te propusiste este objetivo, ¿en quién pensaste? ¿Se lo dedicas a alguien en particular?

—De manera particular a mi hermano. Fue él quien primero confió en que podía hacerlo y me aconsejó que para eso debía de entrenar también mi voluntad para lograr las cosas. Esa es la clave del éxito.

"Muchos lo saben, pero pocos lo aplican al máximo. También se lo dedico a todas esas personas de mi pueblo, Bejucal, que me han apoyado, felicitado y han vivido conmigo mis éxitos como si fueran los de ellos mismos, y eso es realmente el mejor regalo que alguien pueda recibir.

—¿En qué medida influyeron en ello tus padres?

—Mis padres en estos tiempos han sido mi apoyo fundamental. Ellos también forman parte de mis éxitos, y yo formo parte de los suyos. Todos somos uno y a ellos también les dedico mis records. He sido invitado a la Olimpiada de Calculo Mental en Alemania, en noviembre de este año.

—¿La propuesta llegó antes o después de tus records?

—Por suerte fue antes. Para poder participar en una olimpiada de este tipo hay ciertos requerimientos. Por ejemplo, uno de ellos es ser capaz de multiplicar dos números de cuatro cifras en menos de un minuto y medio. Normalmente cualquiera que tenga los requisitos pudiese participar, aunque la selección final de los participantes es mediante un jurado que escoge un número determinado de concursantes. En mi caso yo fui invitado y a la vez seleccionado por dicho jurado, teniendo en cuenta mi labor como recordista en una de las modalidades competitivas.

"Debo aclarar que hace dos años quise participar en la anterior Olimpiada, aunque aún no era recordista; sin embargo, no encontré apoyo alguno."

—¿Has recibido otras invitaciones?

—Sí, pero la más interesante sin dudas sigue siendo la Olimpiada de Cálculo Mental. Convertirme en Campeón Mundial de Cálculo Mental sería como un sueño para mí como cubano y un orgullo para mi pais.

—¿Cómo te miran ahora en la Universidad?

—Indiscutiblemente me miran distinto, aunque yo sigo siendo igual. Muchos me felicitan, otros me preguntan el día de la semana de su nacimiento y todo es muy divertido.

—Tu vida…, ¿piensas que cambiará o seguirá siendo la misma?

—Realmente soy de las personas que recogen lo mejor de su camino. No soy perfecto, pero de los que creen que lo importante es seguir intentando lo mejor. Me gusta mucho el dominó y los juegos de azar. Son una forma de demostrar por medio de la experiencia del juego cómo actuar ante la vida. A muchos les puede parecer una locura, pero pienso que de cada cosa y de cada quien hay mucho que aprender. Me gusta el cine, en la música no tengo un cantante favorito y soy un amante del deporte nacional. Me sumo a los que sufren o se alegran (mayormente me alegro) por los partidos de nuestro equipo nacional de béisbol. Tengo muchos amigos con quienes compartir.

"Me gustan las relaciones estables. Llevo dos años con mi novia y me va muy bien."

—De no ser cibernético-matemático, ¿que otra carrera escogerías?

—Bueno, mi carrera es Ciencia de la Computación, también llamada por algunos Cibernética. La Computación me encanta, es mi favorita y cuando digo computación también me refiero a la matemática básica para entender la computación. Nuestra carrera es de las consideradas difíciles en la Universidad de La Habana, aunque pienso que no es solo el talento lo que hace la grandeza, el esfuerzo es igualmente válido y es, sobre todo, lo que se puede controlar, así que hay que esforzarse. Ya escogí mi carrera y eso no lo puedo cambiar a menos que volviera a nacer, y si volviese a nacer... bueno... creo que sería cibernético.

—¿Calculas todo en tu vida?

—No me gustaría que me miraran como una persona calculadora, aunque no te niego que saco muchas conclusiones y eso me sirve para determinar mi camino a seguir.

—¿Cuáles son tus sueños?

—Mis sueños se podrían resumir así: quiero terminar la Maestría, hacer el Doctorado, casarme y crear un familia, pero sobre todas las cosas ser feliz en toda la dimensión del concepto de felicidad. También reitero la posibilidad de ser Campeón Mundial y llevar este reconocimiento a nuestro país.

—¿Te consideras un genio?

—Creo que tengo un talento, un don, qué sé yo. No soy superior ni inferior. Simplemente lo aprovecho como mejor puedo.

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